Ferrol, 28 de mayo de 2013. La secretaria general de la Igualdad, Susana López Abella, y el alcalde de Ferrol, José Manuel Rey Varela, firmaron hoy un convenio de colaboración para el mantenimiento de la Casa de Acogida de la localidad, que registró el año pasado la mayor tasa de ocupación de Galicia, con un 69 por ciento.

Esta mañana se formalizó la firma del convenio de colaboración entre la Secretaría General de la Igualdad y el Ayuntamiento de Ferrol para el mantenimiento de la casa de acogida municipal, por importe de 46.000 euros durante este año.

La red gallega de acogimiento está integrada por cinco casas de titularidad municipal, localizadas en Coruña, Culleredo, Ferrol, Lugo y Ourense. En total, esta red de acogimiento tiene una disponibilidad de 77 plazas y la ocupación media fue del 56% el pasado año, con un número total de 164 residentes, de las que 98 eran mujeres y 66 menores
El centro de Ferrol cuenta con una disponibilidad de 15 plazas, que el pasado año fueron utilizadas por un total de 29 personas, de manera sucesiva y por períodos medios de tres meses. De las personas residentes, 17 eran mujeres y 12 menores.

En virtud del acuerdo, Igualdad aporta 46.000 euros para el mantenimiento del centro y la prestación del servicio integral de acogida, atención psicológica, apoyo y recuperación integral a las víctimas de violencia de género y a sus hijos e hijas menores, ofreciéndoles alojamiento de forma temporal y con carácter de urgencia.

Para garantizar el funcionamiento de los centros de acogida de titularidad municipal, la Secretaría General de la Igualdad establece convenios anuales con los ayuntamientos, que en 2013 van a ascender a 230.000 euros, destinados a financiar los gastos de funcionamiento y de personal, formado por psicólogas, abogadas, trabajadoras sociales y educadoras sociales.

Esta red de acogimiento supone para las víctimas un espacio de protección ante la situación de indefensión o riesgo, en el que las mujeres residen por un período medio de tres meses, prorrogable si las circunstancias así lo aconsejan, garantizando un tratamiento integral de atención y recuperación para favorecer la normalización y la superación de los efectos de la violencia.