La Xunta formó cerca de 20.000 profesionales en 2020 en prevención y atención a la violencia de género y en la promoción de la igualdad

La secretaria general de la Igualdad, Susana López Abella, intervino hoy por videoconferencia en la VII Jornada Universitaria Gallega en Género

Cerca de 3.000 personas participaron en 2020 en las actividades desarrolladas en las tres universidades gallegas en materia de igualdad

Galicia es pionera en la colaboración permanente en clave de género con sus universidades públicas

Más de 16.000 profesionales de la sanidad siguieron el año pasado los módulos específicos de asistencia y/o tratamiento de las situaciones de violencia de género y otros 2.000 empleados públicos recibieron formación en materia de igualdad

  • La Xunta formó cerca de 20.000 profesionales en 2020 en prevención y atención a la violencia de género y en la promoción de la igualdad
  • La Xunta formó cerca de 20.000 profesionales en 2020 en prevención y atención a la violencia de género y en la promoción de la igualdad

Santiago de Compostela, 10 de junio de 2021.-

La secretaria general de la Igualdad, Susana López Abella, puso énfasis hoy en el esfuerzo formativo que la Xunta está haciendo en materia de igualdad y prevención de la violencia de género tanto en el ámbito universitario, mediante la colaboración con las tres universidades gallegas, como entre el personal público que trabaja en contacto con las víctimas.

López Abella participó hoy por videoconferencia en la VII Jornada Universitaria Gallega en Género donde destacó que la Comunidad es pionera en el desarrollo de medidas con perspectiva de género en el ámbito universitario, con actuaciones desarrolladas en 2020 en las que, a pesar de la pandemia, tomaron parte cerca de 3.000 personas.La formación de profesionales, tal y como subrayó la secretaria general de la Igualdad, es prioritaria en el marco de las actuaciones promovidas por la Xunta en materia de igualdad.

Un total de 20.000 personas recibieron formación el año pasado en materia de prevención de la violencia de género, la asistencia a las víctimas y el tratamiento de las situaciones de violencia; como el personal de la Administración Pública (2.017 personas), profesionales sanitarios (16.635 participantes) y de la educación, psicólogos (250), voluntarios (169), personal de los Centros de Información a la Mujer (180 personas) y miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad (300 profesionales), entre otros colectivos.

La secretaria general de la Igualdad, destacó la necesidad de insertar la perspectiva de género en todas las disciplinas de la docencia gallega. Lo ejemplificó que gracias a la colaboración con las tres universidades gallegas, y por tercer año consecutivo, tomaron parte en las actividades desarrolladas en perspectiva de género y en el marco del Pacto de Estado contra la Violencia de Género un total de 2.728 personas. “Galicia fue pionera en llegar la este acuerdo colaborativo tan necesario y fundamental”, recordó.

López Abella incidió además en el importante papel de las mujeres durante la pandemia, uno de los temas que se abordaron en la jornada de hoy. “Las mujeres desempeñaron y desempeñan un papel imprescindible en la lucha contra la covid-19”, afirmó y puso como ejemplo, entre otros, su papel en los cuidados, en las redes familiares y comunitarias, las trabajadoras esenciales sanitarias y de la limpieza, o en servicios básicos como supermercados.
Recordó, por otra parte, que “en los contextos de confinamiento, las mujeres que sufren violencia de género, las mujeres víctimas de trata y explotación sexual, así como las mujeres prostituidas, niños y niñas, constituyen colectivos especialmente vulnerables” y reivindicó la necesidad de abordar la triple dimensión de esta crisis (sanitaria, social y económica) con un “enfoque de género para que no se incrementen las desigualdades existentes”.

En el caso de la Xunta, se reforzó desde el inicio de la pandemia la atención a las víctimas de la violencia machista garantizando la operatividad de los servicios 24x7 de atención telefónica, apoyo psicológico y social y seguimiento permanente de las víctimas, entre otros; y, por otra parte, la red de centros de acogida con la apertura de un nuevo recurso en Chantada (Lugo) y de centros alternativos.